La periodista Francisca Sandoval falleció el jueves tras recibir un disparo en la cara el 1 de mayo en Santiago de Chile.
La joven de 29 años cubría una manifestación del Día del Trabajador en el barrio Meiggs, en el centro de la capital chilena, cuando fue impactada por una bala. Otros dos periodistas resultaron heridos en el tiroteo.
«Francisca no se nos fue. La asesinaron. A través de estas palabras confirmamos el fallecimiento de nuestra querida Fran. Te extrañaremos y haremos todo lo posible para encontrar la verdad», tuiteó el canal Señal 3 de La Victoria, un pequeño medio comunitario para el que trabajaba la periodista.
El caso de Sandoval ha causado conmoción en Chile.
Con pancartas de «no a la impunidad», centenares de manifestantes se reunieron este jueves, tras el anuncio de la muerte de la periodista, en la simbólica Plaza Italia en el centro de Santiago para exigir «justicia y verdad» sobre el caso.
La protesta fue dispersada por los carabineros, la institución policial chilena, con uso de carros lanza agua.
Varias personalidades y políticos han expresado su pesar por la muerte de Sandoval en las redes sociales.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, se unió a las voces que lamentaban el asesinato y aseguró que no habría impunidad.
El acusado del asesinato
Sandoval recibió un impacto de bala durante una serie de disturbios generados por grupos violentos en el barrio de Meiggs.
Según la prensa chilena, la revuelta estaba vinculada a las mafias que actúan en esta zona de la capital y que se aprovechan de la venta ambulante y la explotación de migrantes.
Los cuerpos de seguridad del Estado detuvieron el 3 de mayo al presunto autor del disparo, identificado como Marcelo Naranjo, de 41 años.
El director general de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), Sergio Muñoz, indicó que «se pudo establecer que (Naranjo) se encontraba en la línea de fuego, utilizando un arma, disparándola».
Antes de que se confirmara la muerte de Sandoval, la policía había imputado a Naranjo por los delitos de porte ilegal de arma de fuego y disparo injustificado en la vía pública.
Pero ahora el acusado, que permanece en prisión preventiva durante los 90 días que dure la investigación, podría ser juzgado por homicidio.
Según un reporte de BBC, Un colombiano y un venezolano también fueron detenidos bajo arresto domiciliario en relación con el hecho.

